¿Por qué razón sería bueno irte a vivir en otra ciudad, solo, sin conocer a nadie? ¿Por qué alguien saldría de su zona de confort, para arriesgarse a empezar una nueva vida en otra ciudad?
Suena de locos a veces, pero muchas veces empezamos a sentir la necesidad de hacerlo ¡y está bien!
De hecho, con el artículo de hoy queremos mostrarte que irte a vivir a otra ciudad, puede darte muchos beneficios 👌🏼
Mientras permaneces en la comodidad de tu ciudad natal, tal vez aún en la casa de tus padres, deberías preguntarte si realmente estás disfrutando y aprovechando todo lo que ofrece un mundo cada vez más “pequeño” y lleno de oportunidades ¡Especialmente si estás en tus 20s!
La etapa de los 20s es llamada la edad de la libertad.
Es el momento de la vida en el que tienes la batería a full de vitalidad y con ganas de explorar nuevas cosas, antes de meterte de lleno en “las responsabilidades de la vida”.
Es en este momento que mucha gente pierde el miedo a lo desconocido, y se da la oportunidad de salir al mundo, en busca de recompensas 😎
Mudarte totalmente solo a un nuevo lugar (no importa si es otra ciudad, un país vecino o como hicimos muchos de nosotros, al otro lado del mundo: Australia) es una experiencia como ninguna otra ¡Es en parte atemorizante y en parte estimulante!
Si ya tomaste la decisión de mudarte o estás a punto de hacerlo, hoy te damos más impulso, contándote algunas de las cosas maravillosas que te podrías encontrar viniendo a Australia (o en cualquier parte del mundo).
1. Tus nuevos amigos serán “refrescantemente” diferentes a los que siempre has tenido
Vivir en una ciudad nueva te da la oportunidad de conocer diferentes tipos de personas, culturas y costumbres.
Esto incluye algunos con perspectivas de vida y experiencias totalmente diferentes a las tuyas, que definitivamente harán que enriquezcas y tal vez cambies tu visión de la vida.
Australia por ejemplo, es un país con una variedad cultural inmensa ¡De hecho, 30% de sus habitantes han nacido en otros países.
Las nacionalidades más comunes en Australia son ingleses, irlandeses, escoceses, chinos, italianos, alemanes e indios.
No habrá personas diciéndote con quién te debes meter y con quién no; puedes hacer conexiones donde quieras y con quien tú quieras.
Adicional, esta nueva gente que conozcas no tendrá ningún conocimiento o predisposición contigo, serán un pizarrón completamente limpio.
2. Conocerás nuevas maneras de divertirte
Probablemente tengas definido un cierto patrón de comportamiento social con tu viejo círculo de amigos.
La cena de los viernes en la casa de alguno de ellos, noche de fiesta los sábados y las salidas a pasar la resaca los domingos con un buen asado.
¡Y no es que esté mal o no sea divertido!
Claramente puedes estar disfrutando estas rutinas; pero algo que te debes preguntar, es si son lo que has querido siempre o simplemente caíste en ellas.
Tus amigos en la nueva ciudad pueden mostrarte nuevas maneras de divertirte, nuevos lugares, presentarte personas maravillosas, otro tipo de comidas, aventuras y fascinantes lugares donde crear recuerdos invaluables.
3. Vivir en otra ciudad te dará una abrumadora sensación de libertad
Algo que necesitas hacer, es dejar por un tiempo (o tal vez para siempre) tu ciudad natal.
Es necesario viajar y darte cuenta de lo grande y maravilloso que es el mundo. Conocer las diferentes culturas que hay en él y su gente, es una oportunidad que no puedes dejar de vivir.
Si te dejas dominar por el miedo nunca sabrás de lo que realmente eres capaz.
¡Las cosas como son!
Una vez abres tu mente a la posibilidad de mudarte y conocer, es algo que nunca querrás dejar de hacer.
4. Vivir en otra ciudad te ayudará a desarrollar capacidades sociales
Exceptuando a las personas altamente extrovertidas; casi todos sentimos cierta incertidumbre, cuando nos invitan a una fiesta donde no conocemos a nadie. Es tan normal como respirar.
Cuando te mudas a una nueva ciudad, terminas yendo por tu propia cuenta a tantos lugares y eventos, que eso de la vergüenza y la ansiedad, terminan siendo excusa de niños.
Pierdes el miedo a la interacción y después de un tiempo, te sentirás como pez en el agua cada vez que tengas que llegar a un lugar donde no conoces a nadie.
Antes de darte cuenta, podrás iniciar una pequeña charla, hacer reír a alguien y hacer las preguntas correctas, para compartir una noche increíble entre completos desconocidos 👏🏼
5. Mudarte a otra ciudad te permitirá reinventarte
Lo mejor de comenzar una nueva vida en otro lugar, es que esto te permite ser la persona que siempre quisiste ser.
Puedes dejar atrás todos esos adjetivos con los que siempre te encasillaron desde la niñez y sacar lo mejor de ti.
Podrás dejar atrás los malos hábitos, las viejas costumbres que no le suman a tu nuevo yo y darte la oportunidad de decir adiós a tu “vieja” versión.
Tendrás también la oportunidad de hacer cosas radicales con tu look, sin tener que aguantar los comentarios de tus conocidos y todas aquellas reacciones chocantes de tus familiares.
¿Siempre quisiste un tatuaje? ¿Un piercing? ¿Un corte drástico de pelo? ¡Ésta es una oportunidad perfecta para que te veas como siempre quisiste!
6. Vivir en otra ciudad te enseñará que para lograr las cosas, solo te necesitas a ti
Cuando te mudas a otra ciudad, sin conocer a nadie, tendrás que arreglártelas por tu cuenta.
Cosas como conseguir un lugar dónde vivir, conseguir un trabajo sin necesidad de “conexiones”, hacer tu propio mercado, limpiar tu propio espacio y mantener limpia tu ropa.
Te darás cuenta que esto te hará crecer y te volverá una persona mucho más recursiva y ordenada en sus asuntos.
Dejar el miedo, trabajar duro y ser perseverante, serán la mejor opción para lograr tus metas en tu nueva ciudad.
7. Sentirás que tu zona de confort se hace muy pequeña
Lo entendemos, tu zona de confort es… cómoda y conveniente, pero al moverte a otra ciudad las cosas serán totalmente distintas.
¡Tendrás que aprender todo alrededor tuyo!
Ubicarte en tu nueva ciudad, aprender un nuevo idioma, conocer cómo funciona el sistema de transporte público y hasta encontrar un café que te haga sentir como en casa (cosa fácil para quienes nos mudamos a Melbourne ☕️ ).
Al comienzo las cosas serán difíciles, pero te garantizamos que después de acostumbrarte, todo funcionará como un reloj.
Fue la ciudad que escogiste y aprendiste a vivir en ella ¡Un resultado ganador!
8. Irte a vivir en otra ciudad revelará tu habilidad para conquistar los miedos
Mudarte a otra ciudad te dará la oportunidad de enfrentar esa vocecita interior que siempre te está cuestionando.
¿Qué pasa si me pierdo? ¿Qué pasa si tengo problemas con alguien? ¿Qué pasa si no logro conseguir trabajo pronto? ¿Qué pasa si no consigo amigos?
El que tengas miedo es totalmente normal, pero tu respuesta siempre debe ser:
“Que pase lo que tenga que pasar, pero aquí estoy y como sea, lo voy a conseguir”
Si te dejas dominar por el miedo nunca sabrás de lo que realmente eres capaz; por es que sacar ese guerrero que tienes por dentro, será el resultado de todo este proceso.
9. En la ausencia encontrarás lo que realmente es valioso para ti
Muchas personas sienten la necesidad de moverse a otra ciudad después de una experiencia negativa.
Que te despidan del trabajo o tal vez una ruptura amorosa, serán razones suficientes para que quieras tener un nuevo comienzo.
Estando en la distancia notarás qué es lo que realmente te mueve como persona; podrá sonar cliché, pero empezarás a saber qué es lo que realmente valoras después de que lo has “perdido”.
Familia, amigos, carrera profesional, lugares o el amor de tu vida, entrarán en esta categoría.
No solo te ayudará a darte cuenta de lo que es realmente valioso para ti, sino que también conseguirás volver con mucha más seguridad y disposición para sacar el mayor provecho de todas estas cosas.
10. Mudarte a otra ciudad te hará crecer y desarrollar como persona
Estamos totalmente seguros que la mejor parte de todo esto, es poder descubrirte como persona y saber que es lo que verdaderamente te “mueve”.
Entre más viajes y más te des la oportunidad de vivir en el extranjero, más tiempo tendrás para definir tus prioridades en la vida.
Australia me enseñó que medida que todo avanza, va cambiando tu perspectiva; al punto de entender, que tu felicidad habita en ti y tu éxito depende única y exclusivamente de ti.
La decisión de salir a explorar el mundo, y tomar las riendas de tu propia vida es una experiencia increíblemente poderosa ¡Así que no más miedos, hazlo!
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